Este proyecto se ubica en Sant Pol de Mar y nace de la necesidad de actualizar una antigua casa de pueblo que ha pasado de generación en generación. Con esta reforma, buscamos adaptar cada espacio al estilo actual de vida de los miembros de la familia.

La casa era un inequívoco reflejo de la expresión de la personalidad familiar. En la vivienda original había varias intervenciones realizadas en épocas distintas, que ahora pedían una redistribución. Por eso en este diálogo arquitectónico buscábamos la utilidad y la integración del día a día, pero con la voluntad de conservar su esencia.

Empezamos eliminando tabiques en la planta baja. Integramos cocina y comedor, recuperamos las antiguas alturas de techo y dejamos a la vista las vigas originales. Dado que la casa está ubicada en una calle estrecha de pueblo, proyectamos en la fachada un amplio ventanal con entrada de luz natural directamente dentro de la sala. La planta superior se destina a la zona de noche, donde ubicamos 4 amplias habitaciones y un baño.