En respuesta a las nuevas necesidades de los propietarios, debíamos construir un anexo a la vivienda para adecuarlo al teletrabajo.
Optamos por plantear un recurso constructivo diferente, rápido, sostenible y modular, utilizando un contenedor destinado al transporte de mercancías. Aprovechamos el entorno rodeado de naturaleza y lo emplazamos bajo un pinar para minimizar el impacto ambiental. Desestructuramos el contenedor realizando una abertura central y otras laterales para aportar una ventilación cruzada. Seguidamente, utilizamos los sistemas de aislamiento necesarios para crear un habitáculo confortable.
Una propuesta que reduce significativamente los gastos, aprovecha la luz natural y emplaza este espacio de trabajo con vistas al mar y rodeado de pinos y viñedos.